Me, myself, and I (III)
viernes, junio 27, 2008
A veces a horas inhumanas me doy cuenta de lo sola que me siento. Cuando por la ventana abierta sólo se oyen las chicharras del jardín y son las 3 de la noche, me invade una soledad que no desaparece con compañía. Intento comprender cosas que me superan, y cada día me siento más insignificante, más pequeña. Algún día desapareceré con mi soledad, sin dejar rastro.
Because no one will remember you when you're gone
6 comentarios:
¡Pero eso es algo pasajero!
Yo me sentía así hace justo una semana, y parece que haya pasado un siglo, hay que ver qué bien que sienta acabar exámenes.
Las que están solas son las chicharras. Esas si que tienen un problema gordo.
EMORFITA?
¡Em(o)a!
Estamos igual, aunque yo no dejo las ventanas abiertas ni oigo chicharras.
Me he tenido que hacer una cuenta para comentarte... Smurficosilla enana, eres grande.
Anímate mujer, ya te quedan menos noches en vela con los apuntes delante... y luego todo el verano en compañía, no?
Venga, que no hay mal que cien años dure!